¡Hola jóvenes! Aquí Edu, recopilando una entrega más lo mejor sobre Gobernanza colaborativa y desarrollo personal.
🏭 Antropoceno
¿Qué podría venir después del final de la historia, como se llamó en los ochenta a esta gran fiesta del capitalismo de las últimas cuatro décadas?
Una forma de llamar a este nuevo tiempo que está emergiendo (aparte de esas siglas de VUCAH, BANI y demás, que sólo reflejaban nuestra confusión con lo que está sucediendo) es la de antropoceno. WWF lo define como «la era geológica actual que se distingue por el papel central que desempeña la humanidad para propiciar significativos cambios geológicos».
En otras palabras, lo que ahora toca es limpiar y recoger toda la basura que el ser humano ha dejado a su paso. Aunque, eufemísticamente se la denomina «polycrisis» para hacer ver que es mucho más que una crisis ecológica.
Son diferentes las propuestas que han surgido en los últimos años para remediar este pronosticado colapso, desde el capitalismo verde, que aboga por producir reduciendo los efectos climáticos, hasta los post/trans humanistas, que huyen hacia adelante con una apuesta total por la tecnología, en una fusión del hombre y la máquina, con el reclamo de «la muerte de la muerte».
Por no olvidar a los más radicales: los defensores del decrecimiento económico, a un lado, y los de un solucionismo tecnológico, a otro.
Por su parte, las élites-élites tecnológicas, según el relato que cuenta el teórico de la globalización mediática Douglas Rushkoff en su último libro Survival of the Richest están pensando más en fantasías escapistas para huir al espacio, lejos de este arrasado planeta. De ahí, la renacida fiebre espacial.
Dando por cierta esta teoría, la pregunta sería: ¿Qué tipo de conducta llevarían en otros planetas? ¿Seguirían esquilmando los recursos geológicos hasta que tuvieran que emprender la huída a uno nuevo?
La ciencia ficción del siglo XX coqueteó con la idea de transformar los ecosistemas de otros planetas para que fueran capaces de soportar vida similar a la de la Tierra. A esta práctica le dieron en llamar «terraformación».
Benjamin Bratton ha titulado así su último libro, Terraformación, para defender que la urgencia actual es, precisamente, terraformar la Tierra «para que siga siendo una anfitriona viable para sus propias formas de vida».
“Se puede decir que el Antropoceno en sí mismo se debe menos a la tecnología desenfrenada que al legado humanista que entiende que el mundo ha sido dado para nuestras necesidades y creado a nuestra imagen y semejanza”.
Benjamin Bratton
Para ello, es necesario un giro copernicano, que llama planetariedad. Implica muchas cosas, entre ellas, también un cambio en las arquitecturas de gobernanza actuales, y que han resultados ineficaces a la hora de resolver la crisis climática. El libro apunta a una planificación completa y vigorosa del ser humano para retroceder sobre sus destrozos anteriores.
Otra narrativa menos marginal, y que está teniendo más éxito, es la del solarpunk, «un movimiento de ficción especulativa, arte, moda y activismo que busca responder y encarnar la pregunta ¿cómo es una civilización sostenible y cómo podemos llegar allí?».
Lo hacen desde una imagen mucho más amable que la habitual de las películas de ciencia ficción más memorables, en donde el futuro post-apocalíptico es un lugar sombrío, oscuro y sucio.
En su «apuesta por un futuro en el que la ciencia y la tecnología se pongan al servicio de la humanidad y del planeta», el solarpunk imagina ciudades llenas de árboles, jardines y otros anhelos del ser humano de este siglo. Vive más cerca del medio ambiente pero aún con las ventajas de la tecnología avanzada. Su ejemplo sería que todas las ciudades sean como Berlín.
La gran aportación, en todo caso, de estas dos últimas corrientes, el terraformismo y el solarpunk, es que creen que el futuro es un lugar múltiple e incierto, a diferencia de todas las anteriores que dibujan un futuro único e irreversible. Las corrientes deterministas de tecnólogos o decrecionistas subestiman la capacidad de los hombres y las mujeres para crear, para ser protagonistas en la construcción de su futuro.
Y lo más importante, (y por eso lo incluyo en una newsletter sobre Gobernanza colaborativa) lo podemos hacer conjuntamente, con la participación de todos y todas.
Leo tus opiniones en los comentarios.
Realfood para tu cerebro
🕸️ Recursos para comunidades
Descubrí RosieLand, una web dedicada exclusivamente a crear comunidades, con infinidad de recursos, tras la que se encuentra Rosie Sherry. Además, tiene una versión de pago con recursos extras.
🧑🏫 Trabajar híbridamente
Esta página, llamada Superpoderes de colaboración, ofrece multitud de recursos (aquí sí son gratuitos) para ayudar a las personas a trabajar de forma remota con éxito. Para los muy cafeteros, ofrecen formaciones sobre colaboración.
También me interesó
📖 Arquitecto cultural
El liderazgo, según Timothy Clark, debería consistir en ser un arquitecto cultural. Expone en el artículo cuatro características de lo que definen.
“Un arquitecto cultural es alguien que crea un ambiente de trabajo culturalmente plano modelando y reforzando la equidad, el respeto y el alto rendimiento”.
🤖 Zine de Meta label
El movimiento de la web3 ha creado un nuevo tipo de contenidos en los que comporten sus ideas alternativas. Se trata de los ‘Zine’. Es la versión blockchain de los viejos panfletos de los años 70. Ahora, se hacen en forma de web y las personas pueden comprar NFT’s, por si se convierten, con el tiempo, en objetos de culto. Este aborda cómo pasar del hiperindividualismo de nuestra época a un nuevo enfoque en la colaboración.
🚶 Gobernanza en tiempo no lineales
Otro «zine». En este, Nathan Schneider teoriza sobre la nueva gobernanza algorítmica que nos proponen las DAO. Me resultó interesante la cita a un estudio sobre formas clásicas de gobernanza, a las que se refiere como «arqueología de la gobernanza».
🤔 Cómo ser un practicante de sistemas
En los últimos meses ha aumentado el interés por el pensamiento sistémico. Este artículo anima a ir un paso más allá, pasando a la «práctica de sistemas», a partir del libro «Learning for action», de Peter Checkland, en el que expone la «metodología de sistemas blandos».
📱 ¿El nuevo iphone?
Apple estrenó sus nuevas gafas virtuales. Aunque no destaca la característica para la que deberían estar llamadas a ser: la puerta de entrada a los contenidos inmersivos. Este artículo explica la estrategia detrás:
“Este puede ser el primer producto en la historia cuyo propósito principal es recordar a los consumidores que no pueden pagarlo cuán mala es realmente la competencia que pueden pagar”.
➰ Comunidades NFOW
Lisa Gill, una de las principales divulgadoras de las nuevas formas de trabajar y las organizaciones acéfalas desde su podcast Leadermorphosis, describe en este artículo las principales comunidades si quieres adentrarte en las organizaciones horizontales.
📚 Fackcheck en las escuelas
Es curioso cómo las diferentes mentalidades aportan diferentes soluciones a los problemas actuales, por ejemplo, las fake news. Desde una mentalidad conformista, se crea una institución para acreditar la verdad de las noticias (fackcheck). Aunque luego, sólo lo hacen de aquellas que parten de un sesgo ideológico contrario. En Finlandia, con una mentalidad más basada en crear personas soberanas, apuestan por enseñar en las guarderías para que los niños sepan distinguir la mentira de la verdad a través de tres simples preguntas: ¿Quién está detrás de la información?¿Cuál es la evidencia?¿Qué dicen otras fuentes? Educación de verdad. El resto, adoctrinamiento.
📚 Acuerdos de equipo
Los acuerdos de equipo son la base de las nuevas formas de trabajo. En ausencia de jefes, se tienen que llegar a consensos sobre cómo comportarse colectivamente. Esta página recopila todo lo que siempre quisiste saber sobre los acuerdos de equipo.
👫 Deja de ser quien no eres
Y como siempre, para cerrar un artículo sobre trabajo interior y desarrollo personal. Este habla sobre los costes de no ser auténtico. En el fondo, explica cómo ser sincero, auténtico y vulnerable nos acerca a nuestra gente.
¡Hasta la próxima entrega!